Dicen que la condición intrínseca del ser humano es la soledad. En cierto modo es así, uno nace y muere solo y eso no se puede discutir.
Los cuadros de Edward Hopper inciden en esta temática, la de la soledad del individuo en la sociedad contemporánea. Yo no soy pintor ni crítico de arte, por lo que atacaré este tema desde el punto de vista que me interesa es decir, el de fotógrafo de calle.

La primera vez que vi fotografías de Hopper pensé: «esto es pura street photography». Inmediatamente me di cuenta de que estábamos hablando de pinturas y no de fotografía lo que me llevó a analizar con más profundidad los cuadros de Hopper.

Escenas cotidianas en las que no pasa nada especial pero al mismo tiempo ocurre todo, la vida en si misma. Una mujer tomándose un café, un hombre trabajando -se supone- a primera hora de la mañana…

…o una chica leyendo en el tren haciendo su trayecto diario que le lleva al trabajo…

…son fieles representaciones de lo que estoy intentando explicar. Están documentando la realidad, aunque sea una realidad imaginada como en este caso.
Continué reflexionando acerca de las pinturas, si esto fuese fotografía la cámara estoy convencido de que montaría un 50 mm. Las lineas son rectas, las proporciones muy naturales por lo que sin duda esa sería la lente.

Otro elemento común es la buena luz, en los cuadros los juegos de las dominantes nocturnas, los juegos de luces y sombras típicos de primera hora de la mañana o de los atardeceres más invernales inciden en este aspecto.

Es apasionante descubrir las semejanzas entre las pinturas de Hopper y la fotografía, estoy covencido que Hopper solo es la punta del iceberg y que también hay otros pintores que han tratado la realidad cotidiana como tema y que han podido influir a diversos fotógrafos.
Como dijo Navia, la fotografía y la pintura son primos lejanos, familiares que beben de las mismas fuentes pero diferentes en la forma.
Os agrego una fotografía de mi admirado Saul Leiter que bien podría pasar por una pintura del comentado Hopper o viceversa.

©Saul Leiter